Buenos días.
Acabo la primera clase del día y poco a poco vamos cogiendo un ritmo bastante normal. Ahora que nadie se vuelva loco y nos digan que será así para siempre porque me da un patachún.
Ayer viendo una serie mientras cenábamos una escena me recordó una anécdota personal, se la expliqué aquí a los churumbeles y nos dio un ataque de risa que por poco la cosa acaba en drama. Os cuento.
Hará unos 12 años o así. Estábamos reunidas unas 20 personas analizando diversas cosas de algo que estábamos haciendo juntos. Un punto del temario era el problema de unos comportamientos digamos anómalos de una de las personas destinatarias de lo que teníamos entre manos.
Como somos ultrademócratas (ya sabes, juntando mi ignorancia y tu conocimiento entre los dos haremos algo grande), en torno a aquella mesa, en la que entre quienes conocían a fondo a la persona en cuestión y quienes tenían capacidad para valorar la situación (yo no era ninguna de las dos cosas) igual había media docena o así, todo el mundo se sintió llamado a ofrecer su análisis.
Yo escuchaba, aquello se iba alargando, y como además las reuniones (incluso si las dirijo yo, o especialmente cuando las dirijo yo) me repelen cada vez más, me iba poniendo nervioso.
Llegado mi turno hice una prolija intervención, abstracta y alambicada, en la que hablé de elementos culturales, factores sociales, referencias psicológicas, posibles enfoques pedagógicos y todo lo que se os ocurra, y finalicé preguntando, enfáticamente: "y todo esto, ¿qué significa?" Miré en redondo, vi veinte caras expectantes, y respondí con el mismo énfasis: "¡pues no tengo ni la menor idea!"
Nos gusta escucharnos. Nos gusta demostrar que sabemos aun cuando se hable de algo de lo que no sabemos nada. Alrededor de un café claro que sí: para qué sirve un café, sino para eso. Pero cuando se habla en serio, como me decía alguien (¿Toni?) hace unos días, más vale callar y parecer ignorante que hablar y despejar cualquier duda al respecto.
Cuidaos mucho y cuidad de vuestra gente. Se os quiere.
No hay comentarios:
Publicar un comentario